lunes, 20 de septiembre de 2010

Que bien me viene este viaje.

Para 0lvidarme ( un poco ) de ella, para darme un respiro y que no se me siga yendo la cabeza peligrosamente y EN VANO.
El penultimo dia de trabajo no pude hacerme la encontradiza ( o invento un sistema a distancia para mantenerla encerrada en el w.c. hasta que yo llegue, o lo veo francamente mal).
El ultimo ella no vino, pero con el ajetreo que trajo la manana apenas me dolio.
Regrese del trabajo aprisa para recuperar en el tiempo de un cafe casi cinco anos de ausencia con alguien en su momento especial.
Bueno, vale, hubo silencios hiperbreves en los que pense " ahora de que hablo?", pero la conversacion que surgio fue fluida y,sobre todo, calida.
Sin bajar el ritmo prepare todo el equipaje, hice toda la casa y baje al pueblo a dejar a la gata ( ay...) y a despedirme.
Cene rico, le explique a mi madre el planning con los itinerarios y los vuelos, me registre en la embajada, vi la tele...
Vamos: me distraje lo indecible.
Y, por la noche, sone con ella.
Dormida, es la primera vez que me pasa...

1 comentario:

Antonia dijo...

si, si que te estás olvidando, se ve muy claro :)